FUNDACIÓN VÍCTIMAS DEL TERRORISMO NÚMERO 86

5 frustración y nuestra rabia hacia algo positivo. Ahí radica la enorme impor- tancia del movimiento asociativo y fun- dacional de las víctimas. Frente al dis- curso de las armas, las víctimas hemos ido forjando un tejido asociativo y fun- dacional de casi treinta entidades, y con ello, no sólo hemos logrado alcanzar un estatus para las víctimas que es un ejem- plo en la unión europea, sino que hemos puesto todo nuestro empeño en honrar la memoria de nuestros seres queridos de la mejor manera posible: luchando por la defensa de los valores esenciales de nuestro sistema democrático. También es nuestra obligación trabajar activamente para seguir deslegitimando el terrorismo y para poner nuestra expe- riencia y todas nuestras capacidades al servicio de la lucha contra cualquiera de sus manifestaciones, con especial énfasis en nuestros jóvenes, que tienen que co- nocer la lacra que es el terrorismo. Este año, con motivo del vigésimo ani- versario del peor atentado de nuestra historia, hemos entendido que era un buen momento, no sólo para traer a nuestra memoria de forma especial a todas las víctimas, sino también para rememorar el horror que supuso para nuestra sociedad y las innumerables muestras de solidaridad que se produ- jeron. La exposición 20 años del 11M. Memo- ria de dolor y solidaridad , el concierto In Memoriam , o la jornada en la Filmo- teca Española, unidos a la conmemora- ción del Día Europeo de las Víctimas del Terrorismo en Madrid han servido para que todos recordemos que ante el terro- rismo no hay justificación posible y que frente un ataque a los pilares de nuestra convivencia no cabe sino la respuesta unánime de todos los demócratas. Estos actos, indudablemente, miran al pasado, pero también al futuro, porque el testimonio de lo sucedido es también una poderosa herramienta de lucha con- tra la violencia. En ellos se dan la mano el dolor y la esperanza, la imposibilidad de aceptar la brutalidad del terrorismo y la confianza en nuestro Estado de de- recho. En ellos se plasma nuestro com- promiso con las víctimas: honrar su me- moria, preservar su dignidad, perseguir la justicia y luchar para que la verdad prevalezca. Hoy y siempre nuestro recuerdo está con todas las víctimas del terrorismo. • “La Fundación Víctimas del Terrorismo no debe buscar un posicionamiento político o ideológico concreto que se imponga sobre otros. Por el contrario, debe ser un punto de encuentro, un espacio en el que podamos colaborar, vertebrando y aglutinando todo lo que no es común convirtiéndose en un vehículo útil para lograr una mejor comprensión de la situación del colectivo de víctimas del terrorismo en España” papel esencial es el de aunar los intere- ses comunes de todas las víctimas, junto a los de las asociaciones, fundaciones y movimientos cívicos que las representan o las apoyan, desde el máximo respeto a las líneas de acción de cada organiza- ción, además de promover y divulgar los valores democráticos, la defensa de los derechos humanos, la pluralidad y la li- bertad de los ciudadanos. La Fundación Víctimas del Terrorismo no debe buscar un posicionamiento po- lítico o ideológico concreto que se im- ponga sobre otros. Por el contrario, debe ser un punto de encuentro, un espacio en el que podamos colaborar, vertebran- do y aglutinando todo lo que no es co- mún, convirtiéndose en un vehículo útil para lograr una mejor comprensión de la situación del colectivo de víctimas del terrorismo en España. Son muchos los valores y objetivos que nos unen, como la defensa de la digni- dad de las víctimas, sumemoria, su reco- nocimiento, su protección, la necesidad de justicia, que no venganza, y la certeza de que el relato veraz es necesario para crecer en una sociedad sana, porque las víctimas del terrorismo son el símbolo de nuestra democracia, héroes que han perdido la vida en la defensa de nuestro Estado de derecho, y eso nos obliga a to- dos a dispensarles la máxima protección y sustentar cualquier actuación sobre los pilares básicos que representan el com- promiso de la sociedad española con las víctimas del terrorismo: memoria, dig- nidad, justicia y verdad. Esa es nuestra principal seña de identidad y nuestra razón de ser. Las víctimas siempre hemos sido cons- cientes de que sólo hay dos bandos, el de los asesinos y el de los demócratas, y por eso muchos de nosotros hemos sabido canalizar nuestro sufrimiento, nuestra