El pasado mes de octubre asistí atónito a cómo la prensa llevaba a sus primeras páginas el quinto aniversario del “fin de ETA”. Es cierto que llevamos cinco años en los que la sanguinaria banda terrorista no ha matado, pero permitidme que me muestre de lo más escéptico ante este supuesto fin. ETA ya no mata, sí, pero… ¿Ahora qué?”.