La enorme tragedia de aquel aciago 11-M marcó un antes y un después en nuestro país y condenó al recuerdo a quienes pudieron sobrevivir. José A. Garrido da un conmovedor testimonio de todo lo que entonces ocurrió y de lo que supuso auxiliar a las víctimas en los primeros momentos. A lo largo de estas páginas entrelaza vivencias, recuerdos y sentimientos, como seguramente le ocurrió a cada uno de los que ese día se encontraban en los trenes. «No me gusta la denominación de héroe, algo que por supuesto no soy. Si ese día hubo héroes, son los hombres y mujeres que quedaron para siempre en las vías y andenes. A todos los demás solo nos puede caber la satisfacción de haber cumplido con nuestro deber, unos como ciudadanos responsables y otros desde la exigencia de sus puestos de trabajo».
Editor: Esfera de los Libros.
Fecha: 2015.